Fisioterapia geriátrica a domicilio
La fisioterapia geriátrica está orientada a mejorar la calidad de vida de las personas mayores, ayudándolas a mantener su movilidad, autonomía y bienestar general. Nos desplazamos a tu domicilio para ofrecer un tratamiento personalizado, adaptado a tus necesidades y ritmo.
¿A quién va dirigida?
La fisioterapia geriátrica está indicada para cualquier persona mayor que quiera mejorar su estado físico, prevenir caídas o mantener su independencia. También es esencial en casos de enfermedades crónicas o tras periodos de inactividad prolongada.
- Personas mayores activas que buscan mantener su forma física.
- Pacientes con artrosis, osteoporosis o problemas de movilidad.
- Personas con riesgo de caídas o que han perdido confianza al caminar.
- Mayores que se están recuperando de una fractura o cirugía.
- Pacientes dependientes que necesitan movilización pasiva y ejercicios asistidos.
Cuidamos tu movilidad y tu independencia
Con el paso de los años, es normal experimentar cierta pérdida de fuerza, equilibrio o flexibilidad. La fisioterapia geriátrica busca prevenir el deterioro funcional y mantener la autonomía en las actividades diarias, reduciendo el riesgo de caídas y mejorando la confianza en el movimiento.
Nuestro objetivo es que cada persona conserve la mayor independencia posible, promoviendo un envejecimiento activo y saludable en su propio hogar.
Tratamientos habituales
- Reeducación de la marcha y del equilibrio
- Fortalecimiento muscular y movilidad articular
- Prevención de caídas y entrenamiento funcional
- Recuperación tras fracturas o periodos de hospitalización
- Terapia respiratoria y ejercicios para mejorar la capacidad pulmonar
- Control del dolor articular y muscular
- Estimulación cognitiva y sensorial
- Ejercicios para la coordinación y la propiocepción
- Movilizaciones suaves para personas con movilidad reducida
- Asesoramiento a familiares y cuidadores
Atención personalizada en cada sesión
Cada paciente recibe una valoración inicial en su domicilio para diseñar un plan de trabajo adaptado a su condición física, patologías previas y objetivos personales. El seguimiento continuo nos permite ajustar el tratamiento para conseguir resultados duraderos y seguros.
- Valoración funcional inicial y establecimiento de objetivos (movilidad, equilibrio, actividades básicas y avanzadas).
- Reeducación de la marcha y entrenamiento de la bipedestación.
- Terapia manual y técnicas de movilización neurofisiológica.
- Estimulación neuromuscular y electroterapia cuando son indicadas.
- Terapia ocupacional orientada a AVDs (actividades de la vida diaria): transferencias, prensión, y uso de ayudas técnicas.
- Programas de ejercicio terapéutico domiciliario para mantener la mejora y prevenir recaídas.
- Asesoramiento a la familia y cuidadores para ejercicios, manejo y adaptación del entorno.
Ventajas de la fisioterapia a domicilio
- Comodidad y seguridad del entorno familiar
- Horarios flexibles y adaptados al paciente
- Comunicación directa y cercana con el fisioterapeuta
- Mejora del vínculo terapéutico y la confianza
- Mayor adherencia y resultados a largo plazo
Equipo profesional
Nuestro equipo está formado por fisioterapeutas titulados y con formación específica en neurorehabilitación, experiencia en atención domiciliaria y trabajo multidisciplinar con médicos, terapeutas ocupacionales y cuidadores. Trabajamos siguiendo protocolos basados en la evidencia y adaptados a la situación individual de cada paciente.
Zonas de servicio
Ofrecemos fisioterapia geriátrica a domicilio en Moaña, Cangas y el resto del Morrazo. Si vives en estas localidades, podemos planificar una valoración inicial en casa y proponer un programa de tratamiento continuo y revisable.
Confirmamos disponibilidad de visitas y horarios según la demanda y la situación clínica del paciente.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Qué beneficios tiene la fisioterapia geriátrica a domicilio?
Permite mantener la movilidad, la fuerza y el equilibrio sin necesidad de desplazamientos. Favorece la autonomía, reduce el riesgo de caídas y mejora la calidad de vida de las personas mayores al trabajar directamente en su entorno cotidiano.
¿Con qué frecuencia se recomienda realizar las sesiones?
La frecuencia depende del estado físico y los objetivos de cada paciente. Lo más habitual es comenzar con dos o tres sesiones por semana, y posteriormente mantener un plan de ejercicios o sesiones de mantenimiento según evolución.
¿Es necesaria prescripción médica para empezar?
No es obligatorio contar con una prescripción para recibir fisioterapia privada a domicilio, aunque puede ser útil si el paciente está siendo seguido por un médico o especialista. En todo caso, realizamos una valoración inicial completa antes de iniciar el tratamiento.
¿Qué tipo de pacientes pueden beneficiarse?
Personas mayores con dificultad para moverse, con enfermedades crónicas como artrosis, Parkinson o problemas respiratorios, así como quienes se están recuperando de fracturas, cirugías o periodos prolongados de inactividad. También se trabaja con pacientes dependientes o con movilidad muy limitada.
¿Se pueden enseñar ejercicios a familiares o cuidadores?
Sí, durante las sesiones proporcionamos pautas y ejercicios adaptados para que familiares o cuidadores puedan ayudar al paciente en casa de forma segura, favoreciendo la continuidad del tratamiento y la independencia diaria.
¿Qué material se necesita para las sesiones en casa?
Normalmente no es necesario disponer de material específico. El fisioterapeuta lleva todo lo necesario y adapta los ejercicios utilizando elementos del entorno: sillas, paredes, cojines o bandas elásticas, según el nivel del paciente.